La planeación del mantenimiento de equipo para un negocio o empresa es indispensable para desempeñar correctamente las labores diarias dentro de dichos establecimientos. Este tipo de mantenimiento debe aplicarse a todo el equipo, la maquinaria y las partes que conforman una planta con el fin de extender su vida útil.
El término mantenimiento de equipo es ampliamente usado para describir los procesos empleados con el fin de mantener funcionando adecuadamente el equipo de una industria, negocio o empresa. Los principales objetivos de un programa de mantenimiento son asegurar que los equipos cumplan los estándares estipulados por las regulaciones de seguridad aplicables y mantener los equipos en un estado óptimo para una producción eficaz. El mantenimiento de equipo es permanente y está relacionado a innumerables negocios, entre los que se encuentran las plantas manufactureras y las oficinas administrativas.
Los esfuerzos para ejecutar el
mantenimiento de equipo pueden incrementar la rentabilidad de un negocio de distintas maneras. Por ejemplo, se pueden reducir los tiempos muertos mediante un plan eficiente de mantenimiento en lugar de llevar a cabo una precipitada reparación de último minuto ante una falla en el funcionamiento del equipo. El mantenimiento preventivo puede asegurar que la producción se detenga lo menos posible ya que evita destinar tiempo, que por lo regular es significativo, a la reparación de equipos con fallas.
Las acciones precisas utilizadas para planear el mantenimiento de equipo son distintas dependiendo del tipo de equipo del que se trate. A veces el mantenimiento se programa de acuerdo a periodos específicos para la revisión de piezas o de componentes removibles, conjunto a la revisión precisa de los componentes clave, cada cierto periodo durante un año. En otros casos, el mantenimiento de equipo toma lugar al realizar inspecciones diarias de ciertos componentes con el fin de identificar problemas potenciales antes de que impacten gravemente la productividad.
En la mayoría de los casos, un mantenimiento preventivo de equipo bien estructurado minimizará las posibilidades de requerir apoyo especializado y le permitirá a los negocios lidiar con los problemas que los equipos presenten sin el requerimiento de ayuda especializada y sin ocasionar muchos inconvenientes o invertir mucho tiempo.
En contraste, cuando no se lleva a cabo un mantenimiento preventivo adecuado, los esfuerzos deben enfocarse a un mantenimiento correctivo. El
mantenimiento correctivo es una forma de mantenimiento al equipo o a las partes del sistema que se lleva a cabo una vez que se suscita algún problema o falla dentro del sistema. El objetivo de llevar a cabo dicha acción es restaurar la operación de dicho sistema. Si bien un mantenimiento preventivo bien administrado puede prevenir el uso de un mantenimiento correctivo, en algunos casos no es posible predecir o prevenir una falla.
La aplicación de un mantenimiento correctivo se lleva a cabo cuando se ha diagnosticado o determinado la razón por la cual se suscitó el problema o la falla. Dicho diagnóstico puede contemplar una inspección física del sistema que se realiza principalmente mediante programas de diagnóstico efectuados por computadora y que evalúan la condición del sistema; mediante preguntas realizadas a los operadores del sistema; o mediante distintos métodos que cambian de acuerdo al tipo de negocio y al tipo de equipo o maquinaria donde se encuentra el fallo.
Para tomar las acciones adecuadas es preciso determinar qué fue lo que causó el problema. Una vez determinadas las causas, se debe proceder a reemplazar los componentes dañados del equipo. En algunas ocasiones, el daño puede ser reparable mediante la reposición o el arreglo del dispositivo o pieza que haya originado la falla. Desafortunadamente en otros casos es necesario el reemplazo completo del equipo para poder restablecer la funcionalidad del sistema.
Para llevar a cabo el mantenimiento preventivo o correctivo y las reparaciones que surjan a partir de dichos mantenimientos, se debe tramitar una orden de servicio. Una
orden de servicio es un documento que proporciona la información necesaria e importante acerca de los bienes o servicios que un cliente obtiene de un vendedor, un proveedor o una sección o departamento dentro de una misma compañía. Es un documento que puede imprimirse en papel o puede visualizarse dentro del sistema de una computadora o a través de Internet. Esta orden incluye la información acerca de lo que debe realizarse en el servicio de mantenimiento; los datos y detalles relacionados al servicio por ser efectuado.
La orden de servicio se efectúa dentro de las instalaciones de la empresa, de la oficina o del departamento. Por lo regular este tipo de órdenes son procesadas por los coordinadores o supervisores de mantenimiento y señala cuáles son las labores que deben realizarse para efectuar las reparaciones o las revisiones. En algunos casos, el mantenimiento preventivo o correctivo es efectuado por contratistas mediante un contacto directo con el proveedor de servicios de mantenimiento o haciendo uso de un sistema de software que vincula al sitio de un servicio de mantenimiento y de esta manera el cliente puede programar por sí mismo las visitas del encargado de mantenimiento. Una vez que el representante acude al lugar para desempeñar el mantenimiento, el sistema asigna de manera automática la orden de servicio al representante. Cuando el mantenimiento ha sido finalizado, el representante ingresa a su cuenta para actualizar el progreso de la orden y el servidor del negocio se actualiza con información de la orden completada y se genera una factura que se envía directamente al cliente.
Cuando haya concluido el mantenimiento correctivo se debe verificar que ello conduzca al restablecimiento de las funciones del sistema haciendo pruebas en el sistema en su totalidad. Dichas pruebas pueden realizarse por etapas efectuadas a ritmos lentos para confirmar que el sistema es funcional nuevamente, antes de iniciar cargas excesivas de trabajo.
Cuando se trata de equipos antiguos, puede resultar costoso el realizar mantenimientos preventivos ya que con frecuencia los costos pueden reducirse mediante la reparación de los componentes del sistema una vez que se suscita alguna falla, es decir aplicando un mantenimiento correctivo. Sin embargo, cuando se trata de sistemas nuevos, es indispensable realizar un mantenimiento preventivo con el fin de disminuir gastos a largo plazo y para ampliar la vida productiva del sistema mediante la detección y prevención de los fallos, tanto como sea posible.